La ubicación del hotel es realmente conveniente, ya que se encuentra en pleno centro de la ciudad, lo cual hace muy fácil explorar el casco viejo y visitar los lugares de interés turístico. Además, está muy cerca de una parada de tranvía, lo cual es genial para llegar rápidamente a la estación de tren. Por otra parte, las habitaciones son realmente amplias y cómodas, lo cual fue muy agradable.

Aunque había pagado por una habitación superior, me dieron una estándar. Cuando reclamé en recepción, se mostraron poco serviciales y no parecieron dispuestos a solucionar el problema de inmediato.

Me dieron una habitación sorprendentemente nueva que da al puerto. Unas instalaciones buenísimas, una cama súper cómoda. Una ubicación céntrica, a una distancia moderada de la Iglesia de Santa María de Rostock.

Ha sido una experiencia inolvidable, me ha gustado un montón el servicio.

La habitación que me dieron era lo suficientemente espaciosa y muy bien amueblada. La ubicación era cómoda y fantástica, puedes visitar el Kropeliner Strasse caminando. Encima, estaba en las inmediaciones de una zona comercial, de restaurantes cercanos y de del centro.

Tenía muchas ganas de visitar St. Peter's Church y elegí el hotel Radisson solo por esa razón. Pero me sorprendió gratamente una de las características del hotel: el garaje de estacionamiento de pago tiene dos entradas, accesibles desde las calles Beim grünen Tor y Lange Strasse. Además, me encantó la ubicación del hotel, en el corazón de la ciudad y cerca del agua, ideal tanto para hacer compras en el centro como para disfrutar de los majestuosos cruceros y la hermosa playa de Warnemünde. Además, la comida fresca de pescado del Mar Báltico, el encanto de Alexandrinenstrasse y los productos locales y artesanías en la plaza histórica, rodeada de edificios hanseáticos de colores pastel y la impresionante Iglesia de Santa María, fueron aspectos destacados de mi estadía. disfruté de deliciosos platos típicos del norte y la historia hanseática de Rostock en el hermoso balneario de Warnemünde.

La única aspecto negativo fue que a pesar de solicitar una habitación superior alejada del ruido del ascensor, nos dieron la última habitación de la planta, que además era más pequeña y de categoría estándar. Casualmente, entre la primera y la última habitación del largo pasillo, no había ninguna libre.

Me encanta volver una y otra vez a este hotel en Rostock. Desde la primera vez que me alojé aquí, el personal me ayudó con recomendaciones locales sobre la moneda. Tiene todo lo que necesito: Wi-Fi, consigna de equipaje, vestuario, recepción y seguridad 24 horas, bar, restaurante. Sin duda regreso para un fin de semana.

Ubicación: el hotel estaba a pocos pasos del centro de la ciudad y también de las paradas de tranvía. La habitación era recién reformada, tenía camas enormes.

El desayuno que disfruté fue increíble, con una variedad de postres y productos sin gluten. La ubicación era ideal, a poca distancia a pie del Museo de la Cultura de Rostock, el centro de la ciudad, la parada del tranvía y diversas atracciones turísticas.

Ubicación conveniente, parking disponible, desayuno completo , habitación increíblemente espaciosa y limpia, cama cómoda.

No se me ocurre nada.

Ubicacion muy buena en el centro de la ciudad con un acceso excelente siguiendo las indicaciones en el centro.Habitacion grande y luminosa.Mobiliario funcional pero de muy buen diseño.

La habitación muy agradable, amplia, bien decorada y en perfecto estado.

Habitación grande y limpia

Cama cómoda. Personal amable.Ubicación conveniente

No hay nada que no me gusta.

en general, el lugar era perfecto y tenía un personal particularmente servicial y atento en la recepción. la habitación era recién decorada y de buen tamaño, incluía un minibar, una caja fuerte y una zona de estar. una ubicación cómoda, a solo 5 minutos andando del museo de la cultura de rostock. había una calle comercial y una panadería justo a la salida del hotel. se abrió un muy bueno restaurante adjunto en el lugar. me han gustado mogollón las 4 noches pasadas en esta propiedad.

Este lugar lo tenía todo para un fin de semana largo, recomendable. Era un hotel perfecto con una vista increíble. Una habitación de buen tamaño, una cama enorme y un desayuno realmente bueno. Había un baño muy limpio con una ducha, un secador de pelo y toallas. La ubicación era bonita y perfecta, no demasiado lejos del Ayuntamiento de Rostock. Además, estaba a pocos pasos de las principales zonas turísticas y también de una estación de tren.

Mi estancia en el hotel Radisson fue genial. La habitación era increíble, grande, espaciosa y limpia. La cama era comodísima y la habitación también disponía de secador y plancha, lo cual resultó muy práctico. Además, el personal de recepción fue muy amable y servicial. La ubicación del hotel era perfecta, ya que estaba en el centro y cerca del casco antiguo. había una parada de tranvía en frente que te llevaba rápidamente a la Estación Central de trenes de Rostock. Sin duda, la comodidad y amplitud de las habitaciones fueron lo que más me gustó de mi estancia en el hotel Radisson.

Todo fue maravilloso 😊

Una habitación recién reformada y de buen tamaño, una estancia perfecta.

Ubicación en las inmediaciones del casco antiguo, del centro de la ciudad y también de las principales zonas turísticas. También proporciona un servicio estupendo.